Las reglas del éxito
En el post de hoy resumo el libro “The Diary of a CEO: The 33 Laws of Business and Life” (“El diario de un CEO: Las 33 Reglas de la Vida y de los Negocios”) de Steven Bartlett. Steven es un emprendedor de éxito que tiene un famoso podcast con el mismo título del libro, The Diary of a CEO, donde ha entrevistado a miles de personas exitosas en los negocios. Steven ha escrito este libro con sus aprendizajes después de todas estas entrevistas, puesto que ha encontrado que las personas con éxito siguen más o menos las mismas reglas, que comparte aquí.
PD: ¡El primer manuscrito de mi libro Lecciones de Vida de Mil Libros: Enseñanzas atemporales de Finanzas, Salud, Relaciones y Felicidad está listo! ¡Qué emoción! Ahora toca compartir, editar y rehacer, pero el primer paso está hecho. Saldrá en 2024, muy atentos porque vendrán oportunidades antes…
Aprendizajes principales
En todas las carreras, hay cinco “cubos”: conocimiento, habilidades, red de contactos, recursos y reputación. Y deberíamos ir llenando los cubos en ese orden, en lugar de querer saltárnoslos. Es decir, normalmente primero estudiamos para adquirir unos conocimientos, que nos darán un trabajo. En el trabajo empezaremos a adquirir habilidades con la práctica. Cuando seamos buenos, nuestro trabajo será valioso y nuestra red de contactos se expandirá. Al tener más contactos, cada vez tendremos más recursos. Al final, tendremos una buena carrera que nos dará, sin duda, reputación en nuestro sector. Ese es el orden que deberíamos seguir. Por tanto, si eres joven y has llegado directamente a un trabajo con reputación y donde ganas bien, pero sin embargo no estás aprendiendo nada nuevo ni mejorando tus habilidades, quizás deberías pensar dos veces si seguir ahí. Los conocimientos y habilidades son lo único que sobrevivirá a si tienes un problema de carrera, como perder tu trabajo o un error que te cueste tu reputación. Nunca dejes de aprender y mejorar, es la base de la pirámide.
Hazte preguntas poderosas. Muchas veces pasan los días y los meses sin haberte parado a reflexionar ni un momento por qué haces lo que haces. Y ese comportamiento es muy dañino, porque el tiempo de vida no es infinito. Para ello, es importante hacerte preguntas como:
¿Qué quiero realmente?
¿Qué haría si supiera que no iba a fallar?
¿Qué haría si supiera que fallaría pero que querría hacerlo igualmente?
Si ganase la lotería y tuviera 100 millones de euros en el banco, ¿cómo pasaría mi tiempo?
Si repitiese las cosas que hago hoy durante el resto de mi vida, ¿acabaría con una vida que quiero o con una vida que no quiero?
Prioriza siempre tu primer cimiento: en el libro, el autor habla de una charla que dio Warren Buffett en la graduación de unos estudiantes en Nebraska. Decía así:
Cuando tenía 16 años, solo podía pensar en chicas o coches. Con las chicas no tenía éxito, así que pensaba en coches. Si en ese momento se me hubiera aparecido un genio de una lámpara y me hubiera dicho: “puedes escoger el coche que quieras, lo tendrás mañana mismo”, yo le hubiera preguntado “¿cuál es el truco?”. Él me habría dicho “es el único coche que recibirás en tu vida, nunca vas a tener otro”. ¿Qué habría hecho yo entonces? Habría cuidado ese coche como nada. Lo llevaría a mantenimiento regularmente, en cuanto se hiciera algo lo solucionaría, lo mantendría en el garaje cuando no lo uso, lo trataría con muchísimo cuidado… Bien. Nosotros ya tenemos algo que solo vamos a tener uno en la vida: nuestro cuerpo, y nuestra mente. Sin embargo, no los priorizamos. Vienen después de nuestro trabajo, nuestros amigos, nuestras tareas… Todo lo que hagamos hoy afectará a su estado dentro de 10, 20, 30 años. Deberían ser nuestra prioridad número 1. La salud es nuestro primer cimiento.
Cuando haya algo que no entiendas, infórmate más: la actitud que solemos tener hacia cosas que no conocemos es la de no querer saber nada de ellas. Por ejemplo, la inteligencia artificial, o las criptomonedas. Cuando aparecen cosas así, solemos “escapar” y decir que no nos gustan, pero sin habernos informado de nada. O por ejemplo, cuando vemos a alguien tener éxito por algo que nos parece raro, pensamos: “pf, seguro que es porque es guapo/seguro que es porque ha tenido suerte”, etc. Esa sería la manera de “escapar" de una situación rara. Mucho mejor intentar entender con humildad el mundo que nos rodea y qué podemos aprender de ello. La próxima vez que veas algo que no entiendas, pregúntate:
¿Por qué creo lo que creo? ¿Es posible que esté equivocado? ¿Sé de lo que hablo? ¿Estoy escapando porque no lo entiendo? ¿Estoy siguiendo al rebaño? ¿Son mis propias creencias o las creencias de los que son similares a mí?
El autor comparte su ecuación para la disciplina, que es: Disciplina = Valor del Objetivo + Recompensa del Trabajo - Coste de la Trabajo. ¿Qué significa esto? Que para aumentar tu disciplina en hacer algo, debes aumentar el valor de conseguir el objetivo (¿por qué quieres hacerlo?), aumentar la recompensa que recibes de ir a por ello (hacer el trabajo más divertido y agradable), o disminuir lo que te cuesta hacerlo. Por ejemplo, si quieres mejorar tu disciplina con el gimnasio, puedes encontrar una motivación muy fuerte, un beneficio muy grande de conseguir tu objetivo (querer estar de cierta manera para un viaje o recuperarte de una enfermedad grave), puedes también hacer que sea más divertido encontrando tu deporte ideal, o puedes disminuir algo que te cueste, por ejemplo, cambiarte a un gym a cinco minutos de casa para ir más.
Os dejo el link del libro aquí.