En el post de hoy resumo el libro "La Cartera Permanente" de Harry Browne, de las estrategias de inversión más sencillas y seguras del mercado.

¿Qué es la Cartera Permanente?

La Cartera Permanente consiste en invertir en cuatro activos repartidos a partes iguales (acciones, oro, dinero y bonos). Browne identificó cuatro estados de la economía, de forma que para estar protegido ante cualquier circunstancia y no perder dinero, propone contar en tu cartera con al menos un activo que se comportara especialmente bien en cada uno de ellos. De esta manera, al subir mucho un activo en su estado económico idóneo, compensa las pérdidas de los demás. Dichos estados macroeconómicos serían los siguientes:

1. Prosperidad: el que todos deseamos, en el que las acciones suben, los negocios prosperan... y lo más importante: las acciones suben. Los bonos también mejoran.

2. Inflación: los precios suben y el dinero en efectivo pierde valor. Por ello, en este periodo, el valor refugio y lo que se dispara es el oro.

3. Recesión económica: el periodo que todos tememos, en el que todo baja, excepto el dinero que, además, nos permitirá comprar otros activos a precios baratos. En general es un periodo con baja rentabilidad, pero suele cambiar de fase pronto.

4. Deflación: al contrario de lo que ocurre con la inflación, los precios bajan, pudiendo desencadenar en una depresión económica. Sin embargo, al reducirse los tipos de interés, los bonos aumentan.

Por tanto, ¿qué propone Harry? Muy simple: divide tus inversiones en 25% de cada uno de esos 4 activos. Luego, una vez cada X tiempo (puede ser tan poco como 1 vez al año, que es lo que recomienda el autor para no afectar su rentabilidad), cuando te toque invertir el dinero que has ahorrado, te encontrarás con que la cartera no está a 25% cada uno (obviamente, algunos han bajado, algunos han subido...): es la hora de rebalancearla.

Es decir, venderás los que estén a más de 35% (significa que han subido de precio y, por tanto, estás vendiendo cuando está caro), y comprarás de los que están a menos de 15% (significa que su valor ha caído y, pues, estás comprando cuando está barato). El margen de 10% lo recomienda el autor para no perder rentabilidad.

Como último apunte, aunque Harry Browne recomendaba controlar la cartera solo una vez al año, también decía que, si nos enterábamos de fuertes movimientos en el mercado, no estaba de más echar un ojo a la cartera y rebalancearla antes de tiempo si estábamos fuera de las bandas.

¿Cómo ha trabajado desde entonces?

Desde 1972 la rentabilidad de la Cartera Permanente ha sido del orden del 10% anual, similar e incluso superior a la rentabilidad de la renta variable. La diferencia principal, sin embargo, es que casi nunca está en negativo: exclusivamente ha tenido 4 años negativos y su caída máxima es de 5,81%, nada que ver con los vaivenes de la bolsa.

Lo bueno de esta estrategia de inversión es que no lleva nada de tiempo, únicamente te molesta una vez al año, es simple, y lo más importante: es mecánica, lo que te evitará los errores humanos que son lo más difícil de las inversiones.

*Este artículo no es consejo de inversión.

El libro de La Cartera Permanente está gratis en Kindle Unlimited, os dejo aquí el link.